En España, un país aparentemente democrático, y donde aparentemente existe la libertad de expresión, su Presidente del Gobierno, D. Mariano Rajoy, no sólo calla por respuesta sino que, manda callar a quien no opina como él.
Es conocida la forma de actuar de D. Mariano, "la técnica del avestruz": ante cualquier problema, D. Mariano esconde la cabeza y si puede, todo el cuerpo, intentando que así escapen los problemas, pues según esta técnica, si no encuentras con quien hablar al final pasas a otro tema, te olvidas, y el asunto queda zanjado a tu favor. ¿Y por qué no hablar, dialogar y llegar a acuerdos? Pues porque en una aparente democracia dictatorial, no se necesitan acuerdos, yo mando, yo ejecuto, ¡y punto pelota!
¿Y qué pasa si él, o ellos quieren hablar? Pues si él quiere hablar: "O te callas, o reconoces el mérito a la gente". Y si nosotros queremos hablar: Pues se activa el control de masas, con un costo inicial de 493.680€ que es lo que cuesta un camión de cañón de agua (lógicamente para usarlo contra los manifestantes, no para saciar su sed ... bueno, algo si), y allá donde no llegue el camión, pues pelotas de goma de los antidisturbios y leyes represivas como la nueva Ley de Seguridad Ciudadana o Ley Mordaza.
Todos callados, porque si él, D. Mariano calla, los demás, parece ser que también debemos callar ...
Todos callados, porque si él, D. Mariano calla, los demás, parece ser que también debemos callar ...
Sí, claramente vivo en un país donde la libertad de expresión impera, donde opinar diferente se considera enriquecedor, y donde manifestarse en la calle constituye el ejercicio de un derecho.
¡Y va, y me lo creo!.
Si ya lo dijo su Majestad D. Juan Carlos I a Hugo Chávez: ¿Por qué no te callas?
Valencia. 10-02-2014
Bea García.
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